Estos poemas los desencadenaste tú
Como se desencadena el viento sin saber
Hacia dónde ni por qué
Son dones del azar o del destino que, a veces
La soledad arremolina o barre
Nada más que palabras que se encuentran
Que se atraen y se juntan
Irremediablemente y hacen
Un ruido melodioso o triste
Lo mismo que dos cuerpos que se aman
Son dones del azar o del destino que, a veces
La soledad arremolina o barre
Nada más que palabras que se encuentran
Que se atraen y se juntan
Irremediablemente y hacen
Un ruido melodioso o triste
Lo mismo que dos cuerpos que se aman
Irremediablemente y hacen
Un ruido melodioso o triste
Lo mismo que dos cuerpos se aman