condenados, seguimos caminando ciegos.
entre restos de basura donde reina la ambicion.
respirando el veneno que expelen tus maquinas.
que escriben nuestros nombres sobre frias lapidas.
una tumba, cavada por generaciones.
un progreso cimentado sobre nuestros cuerpos.
seguimos mirando estos hechos como algo muy lejano,
ahogados en nuestras rutinas.
este camino sin rumbo nos enferma el cuerpo, nos envenena el alma,
nos deja sin mundo.
tu ambicion es el cancer la enfermedad,
que nos deja sin mundo dia tras dia.