Siempre doy gracias a Dios
Y mientras viva siempre lo repetiré
Si la vida que tengo se la debo a Él
Por eso siempre, siempre quiero serle fiel
El amor de mi Jesús es tan grande que como Él no hay otro igual
Si el inocente por nosotros se entregó
Y nueva vida todos nos quiso brindar
No le importó que su cuerpo sintiera el dolor de aquellos clavos
Él se entregó y con su sangre preciosa lavó todos mis pecados
Pero cómo no adorarte
Si tú has cambiado todo mi lamento en baile
Esa tristeza del pasado ya borraste
Tú me cambiaste la vida, sanaste mi herida, me diste la paz
Pero cómo no adorarte
Por más que intente no tendré con qué pagarte
Todo lo que has hecho en mí, cómo callarme
Tú me cambiaste la vida, sanaste mi herida, me diste la paz
Pero cómo no adorarte