Podría esperarte una eternidad
Mientras bebo vino con la señora adversidad
A quien, cómo le gusta alegar
Sin afán de algún punto llegar
Lo de ella es algo serio
Esperó en cautiverio
Envidia del asfalto donde dan paso tus pies
Envidia del destino a dónde ves
Envida de la ropa que le da abrigo a tu piel
Envidia ver el clima que te ampara y que te es cruel
Envidia de la gente que te puede mirar
Y de los que te pueden escuchar
Envidia si compartes tus momentos
Envidia de esos cuerpos que inhalan ese aliento
Que tú exhalas, y, al toparte, no admiran la más grande maravilla
La adversidad se ahorca con sus necias palabras
Muere, resucita
Y yo vuelvo a escucharlas
Mientras no se vaya, no te veré
Mientras tú no vengas, yo no iré
Podría irme, y me detengo
Veo cómo te voy perdiendo
Envidia del asfalto donde dan paso tus pies
Envidia del destino a dónde ves
Envida de la ropa que le da abrigo a tu piel
Envidia ver el clima que te ampara y que te es cruel
Envidia de la gente que te puede mirar
Y de los que te pueden escuchar
Envidia si compartes tus momentos
Envidia de esos cuerpos que inhalan ese aliento
Que tú exhalas, y, al toparte, no admiran
La más grande maravilla