La Tierra no es un sitio que se pisa
Es un latido que vive en el pecho
No es recurso, no es objeto, no es presa
Es la madre que da todo sin derecho
Nos cría el árbol, el río, la brisa
Pero el hombre lo olvida al construir
Arrancamos raíces por oro
Y sembramos dolor por solo existir
Eduquemos almas que la sientan
Como parte de su propia piel
Que no exploten, que no arrasen
Que la abracen con fe y con bien
Que los niños vean en los montes
No riqueza, sino hogar sagrado
Que la Tierra no sea negocio
Sino un vínculo eterno y legado
La Tierra no nos pertenece
Somos parte de su corazón
Cuidarla es cuidarnos a todos
Y sembrar conciencia en cada canción